
Me regalaron la oportunidad de contar cuentos durante mi estancia en La Palma. Fueron seis “mini-sesiones” en Educación Infantil. Hacía meses que no narraba historias. Son de esos “parones” que uno se impone para poder mejorar (más que un STOP hacemos un ceda al paso). Por muy cortas que sean las sesiones, sesiones son, son personas diferentes, encuentros diferentes… Todo muy intenso y bello a la vez.